Primavera que marca la cuenta atrás para el fin de semana más esperado de todo el año, la primavera musical en forma de Primavera Sound. Que entre su suculentísimo cartel de este año cuenta con Metronomy, cuyo segundo disco publicado hace pocas semanas podría reflejar todo este cúmulo de sensaciones entre sus canciones, aunque algunas se adelanten un poco y realmente nos transladen al verano. Un disco que empieza con "The upsetter", una canción de melodía luminosa pero letra triste y desesperada que finalmente resulta totalmente adictiva, y acaba de florecer y estallar en esa "Love letters" que le da título y en cuyas trompetas finales quisiera vivir para siempre porque parecen guardar la esencia de estos días.
Primavera en unos sonidos que evocan al Mediterráneo más luminoso fabricados en la más gris Inglaterra, probablemente influenciados por ese mar de la Riviera inglesa de la que proceden. Sonidos que ya mostraban en su disco de debut y que llevan más allá en este, combinando temas más bailongos con otros más tranquilos, jugando con una electrónica sutil y elegante que se empapa de pop y funk, de guitarras suaves y ritmos juguetones. Una propuesta apetitosa que muero de ganas de poder disfrutar en directo (si algún solapamiento doloroso, muy probable con el apretado cartel del primer día de festival, que alberga más del 50% de las bandas que más ganas tengo de ver) y que está llenando de música mi alrededor todos estos días. Dos canciones claramente candidatas a canciones de este año.