miércoles, 1 de junio de 2011

Especial PS 2011 III: The age of adz - Sufjan Stevens

De manera completamente anárquica (sinceramente, en función del tiempo que dispongo cada día para escribirlas) sigo con la tercera de mis crónicas festivaleras, hoy dedicada a, en mi opinión (y creo que en la de muchos más), EL CONCIERTO del festival. Polémico por la manera que hubo de distribuir por sorteo las entradas para el Auditori, por otro lado marco ideal para el mismo, fui afortunada y las conseguí para el día que yo quería, es decir, el jueves. Cabe decir que para mí, además, fue el primer concierto del festival y uno de los que más deseaba ver, aunque iba con un cierto temor a que se centrara en su inclasificable último disco, el cual a ninguno de los que nos juntamos para verlo nos convencía. Pero igualmente todos deseábamos ver a Sufjan.

Apareció en el escenario cantando "Seven swans", un clásico, y acompañado por un estelar espectáculo de luces, preludio de todo lo que iba a venir después, y mi piel empezó a erizarse. Poco después se descubría toda la escenografía, con 12 músicos encima, al mando de dos baterías, varios instrumentos de viento, teclados, guitarras, bajo y dos coristas; la cosa prometía. Nuestro temor inicial se hizo realidad, sí, focalizó su show en su último disco. Pero lo hizo de tal manera que consiguió fascinarnos a todos, metiéndonos en el bolsillo con la interpretación de los temas, acompañados por un espectacular show de luces, colores, proyecciones y largas introducciones en las que Sufjan hacía gala de una gran elocuencia y una cierta excentricidad (porque se le iba la pinza bastante, todo hay que decirlo).
Parecía que su misión era, autodenominándose capitán de la nave espacial en la que él nos decía que estábamos, convencernos de su transformación musical del folk al "pop cósmico" (como él definía su sonido), explicando los temas e intentando justificarse. Cualquier otro hubiera fracasado, pero él consiguió lo que pretendía. Nos introdujo en su atmósfera y hizo que nos entusiasmara aquello que en principio no nos convencía. De tanto en tanto, entre temas muy sonoros, se marcaba un momento de intimidad con algún tema más folk, y uno de esos momentos fue uno de los más emotivos del concierto, una preciosa versión del "The one I love" de REM, que a continuación os enlazo. Como véis, considero que la ocasión merece hacer una excepción en este blog, cambiar la estructura de la entrada y poner más de una canción.



La mayor parte de las casi 2 horas de concierto fueron más o menos tranquilas, pero todo estalló al final, durante la interpretación de la larguísima "Impossible soul", cuando a mitad de canción nos invitó a levantarnos y bailar, cosa que todos obedecimos al instante, dejándonos llevar por el ritmo y el espectáculo que nos ofrecía. Pero la apoteosis no acabó ahí, ya que tras desaparecer del escenario y hacerse un poco de rogar, volvió para realizar ese bis que todos estábamos esperando, su temazo "Chicago", que no podía faltar. Ahí fue donde culminó la locura general de un público entregadísimo, entre globos gigantes volando por la platea y un ambiente festivo precioso. Uno de esos momentos que nunca se borrarán de mi retina, y que testimonia el siguiente vídeo.



Berit, Vincent, Carre, Viola, Txarls y yo salimos del auditori como en una nube, alucinando por todo lo que habíamos visto y convencidos de que habíamos visto el mejor concierto del festival, con una sensación de "y ahora, ¿qué?" que teníamos que quitarnos para poder disfrutar de lo que quedaba de festival. Algo que difícilmente olvidaremos.

Finalmente, me apetece presentaros una de las canciones de su último disco, llamado "The age of adz", que fue de las únicas que me gustaban antes del concierto, y que me encantó escuchar en directo. Un tema en la línea del resto, con ese toque electrónico del disco pero con un toque épico y un estribillo pegadizo, y aunque extraña, con todo el estilo propio de Sufjan, con ese tratamiento tan particular de los ritmos y los acompañamientos. Una canción que cada vez que escucho, me gusta más, y que os dejo en la versión que se escuchó en el concierto. Y disculpad por la longitud extra de esta entrada, pero no podía dejar de explicar todo lo que allí vi porque fue una experiencia inolvidable.

10 comentarios:

  1. A ver, ¿como os lo tengo que decir? ¿queréis que me muera de la envidia?. Casi lloro de la rabia y la impotencia de no haber podido ir, sobretodo viendo el extasis colectivo con Chicago (snif.. snif... snif...)

    Joder, que pasada de montaje. Se nota que lo disfrutaste por tu forma de explicarlo.

    Un abrazo!!

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  2. Me hubiese encantado estar allí. Todo lo que comentas es propio de los grandes. Que vayas a un concierto sin que el repertorio del artista te convenza demasiado a priori, y que luego acabe con el público en el bolsillo eso lo consiguen solo los grandes. -A mi me pasa con Rufus Wainwright, algunos de sus discos son de difícil digestión. Pero luego lo ves en concierto y flipas-

    Me gusta mucho que rompas la estructura de tu blog cuando hay algo que merece la pena.

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  3. Pues será muy clásico, pero me has pillado, no tenía ni idea.
    Un placer descubrir nueva música.

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  4. Para un servidor este concierto (y si no leí mal hacía doblete) merecía el festival entero... pero me lo perdí. Te Age of Adz no me acaba de llegar pero con Illinoise se ganó el cielo (por cierto, sonó JW Gacy jr?) Gran crónica, mil gracias.

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  5. Uri, pobre, no sabes cómo te entiendo, andaba yo igual que tú hace un año, así que ya sabes lo que toca el año que viene, jeje. No sabía que te gustara Sufjan, es que es una pasada de hombre, de esos que, guste o no guste lo que hace, hay que reconocer que tiene un punto de genialidad, porque no es un cantautor de folk al uso, va mucho más allá, y con cosas como estas lo demuestra.

    Me salió la crónica un poco exagerada, lo sé, pero es que no puedo expresarlo de otra manera, lo disfruté demasiado!!

    Un abrazo!!

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  6. Midas, no te imaginas lo que me acordé de ti. Porque hubieras entrado igual de escéptico que nosotros, te hubiera encantado el show, te hubieras echado a llorar con la versión del "The one I love", que sé que es una de tus favoritas de REM, y hubieras bailado como un loco el "Chicago". Estoy segura de que te hubiera gustado muchísimo. Es un grande.

    Gracias por lo que me dices, la verdad es que me salió algo larga la entrada y exagerada como pocas, pero me alegra que te gustara. Ya ves que la ocasión lo merecía con creces. :-)

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  7. Sergio, nunca es tarde para descubrir al gran Sufjan. Yo no te creas que hace mucho que lo conozca. Te recomiendo que escuches su disco "Illinoise", es una joyita. Ya me dirás qué tal :-)

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  8. Green bean, primero de todo, bienvenido a este pequeño espacio musical, espero que encuentras más cosas que te gusten por aquí.

    Salimos del concierto pensando que sólo el mismo ya valía el abono entero. Sí, hizo doblete, y menos mal, porque así muchos más pudimos disfrutarlo. A mí tampoco me convencía el último, pero después de verlo con todo el show, cambié un poco el punto de vista. Pero eso sí, el "Illinoise" es algo sublime.

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  9. llevo un par de dias un poco liado y hasta ahora no habia tenido tiempo de pasarme por aqui asi que hoy he aprovechado para ver todos los post que le dedicaste de momento al Primavera sound. a ti que te gusta tanto la música entiendo que disfrutaras tanto del festival que contaba con unos grupos tan buenos.
    me habria encantado estar con vosotros en el concierto de Sufjan, los conciertos asi son los que más molan.

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  10. Boris, no te preocupes, si es que hasta me estoy haciendo pesada con tanta crónica de concierto, pero tranquilos que o el sábado o el domingo concluyo la serie y vuelvo a la normalidad, que acabaréis de mí hasta arriba!!

    Pues como puedes ver en esta y otras crónicas disfruté como una auténtica enana de guardería del festival, quizás por ser el primero fue tan especial, pero es que fueron tantos conciertos y tan buenos que es imposible que no fuera así. Y bueno, el de Sufjan fue algo a otro nivel, un auténtico espectáculo visual y sonoro, te hubiera encantado, creo.

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