"Tengo sabía que el tiempo transcurre de manera irregular. En su origen es uniforme, pero, cuando se consume, se transforma en algo irregular. Ciertos periodos de tiempo son terriblemente largos y pesados; otros, breves y ligeros. Y, a veces, el orden de los acontecimientos se altera y, en los momentos críticos, incluso desaparece. También se le añade lo que debería añadírsele. Al regular el tiempo a su capricho, la gente quizá regule su propia razón de ser. En otras palabras, al realizar esas operaciones, logran conservar a duras penas la cordura. Si tuvieran que aceptar el tiempo vivido de manera uniforme y secuencial, sus mentes no podrían soportarlo. Sus vidas serían igual que una tortura. Así pensaba Tengo.
Gracias al ensanchamiento del cerebro, las personas han adquirido la noción de temporalidad, pero, al mismo tiempo, han aprendido la manera de alterarla y regularla. Las personas consumen tiempo sin cesar y, paralelamente, reproducen el tiempo que su conciencia ha regulado. No es una tarea sencilla. Resulta natural que el cerebro consuma el cuarenta por ciento de la energía total del cuerpo."
1Q84 (Libro 1) - Haruki Murakami
En este inicio de año de planes invertidos, entre delirios febriles, una cabeza a punto de estallar y un malestar físico que poco o nada tiene que envidiar a cualquier apaleamiento, hallo consuelo y cura en horas de series, películas y en las páginas de este cautivador libro de Murakami, que va ganando a medida que avanzan las páginas. En una de esas sesiones me topé con este sencillo texto que, por alguna extraña razón, me gustó. El poder de la percepción del tiempo, la base de nuestra vida en sus olas. Porque una de las sensaciones más acuciantes del año que hemos dejado atrás es una tremenda rapidez del tiempo.
Porque a medida que me hago más mayor siento como si el tiempo fuera aumentando su velocidad de forma casi exponencial. Los meses pasan en un suspiro, y con varios suspiros pasa un año y se te escapa de las manos. Miles de planes quedan en el tintero, como tantas canciones quedaron en simple proyecto y nunca llegaron a tener su entrada. Como esta joya del último y algo irregular disco de la formación islandesa, que me acompañó en varios momentos y quiero recuperar para inaugurar 2013 en el blog (que vendrá acompañado de alguna sorpresa que ya os comentaré más adelante), para que me sirva de cura física adicional con toda su suavidad y su delicadeza. Y con ella empezar de una vez bien el año.
Qué bien que hayas empezado 1Q84, le cuesta un poco arrancar y es algo raro, pero a mí me parece una joya. Ya sabes que soy una gran fan de Murakami jejeje
ResponderEliminarEn cuanto al tema de Sigur Ros... cada vez que lo escucho se me ponen los pelos de punta. Además, me pasa una cosa muy curiosa cuando suena en mi iPod de camino al trabajo, y es que cuando suena la última parte, que va subiendo, siempre se me pasa por la cabeza los momentos más especiales de mi vida, y cada uno de ellos no dura más de 2 segundos. Me encanta. Y me encanta tu primera entrada del año ;)
¡Un besote!
Yo creo que el tiempo pasa rápido cuando todo va bien y somos más o menos felices. Vamos que en realidad es buena señal que el tiempo pase rápido. No se te está haciendo larga esta semana ¿? jajaja
ResponderEliminarYo he empezado el año con un libro de mujeres de marcela serrano y con jason lytle :)
Me ha encantado esta frase, podría valer como microrrelato ?¿
El poder de la percepción del tiempo, la base de nuestra vida en sus olas.
Besos.
Bridget, sabía que te encantaría esta entrada!! El libro la verdad es que gana tantísimo con las páginas que el segundo libro es adictivo, te lo jalas en pocos días!! Me está gustando muchísimo, pero para mí como "Kafka en la playa" ninguno.
ResponderEliminarEs normal que esta canción te provoque este efecto, es imposible no dejarse llevar por esas orquestaciones y ese estribillo. Es para poner banda sonora a tu vida entera. Yo la llevé en el mp3 de viaje por Noruega y no veas qué sensación.
Un beso y me alegro de verte por aquí!!!
Viola, va a ser por eso que me pasó tan rápido este año, tanta felicidad sí que hace el tiempo volar!!! Y sí, se me pasaron los días que estuve enferma taaaaaaaan lentos, jeje, pero bueno, no fue tan terrible al final, ahora, llega a ser uno más y me las corto en canal!! jeje
ResponderEliminarMe alegro de que te gustara la frase, aunque como microrrelato... no sé, le falta una historia, jeje.
Un beso!!
Rafael, volviste a la blogosfera, gracias por avisar!!
ResponderEliminar