Escribo estas líneas totalmente fuera de contexto, desde Ljubljana, a donde de manera precipitada me han enviado tres días, pero aún con todos los recuerdos primaverales intactos y bien frescos para poder ser recreados, aún con el sueño que me ha causado haber dormido menos de 4 horas esta noche, quizás me dé por desvariar, quién sabe.
Después de dormir cinco escasas horas el viernes tuve que levantarme antes de lo que quería por culpa de asuntos laborales, aunque por suerte no me amargaron el día. A la una había quedado con Viola y su amiga Paloma para comer, acabando por casualidad en un lugar monísimo cerquita del Forum con un menú a 8,50 euros la mar de apañado, un buen descubrimiento para años posteriores, sin duda. No disponíamos de mucho tiempo ya que a las cuatro actuaba Nick Garrie en el Auditori y había que estar un poco antes, para intentar coger buen sitio, que conseguimos sin ningún problema. Les guardamos sitio a JMHulme, Vanessa y Julia, a los que por fin veía y con los que me hacía especial ilusión compartir el concierto, hasta que aparecieron al poco de empezar. El cantante británico desplegó todos y cada uno de los temas de su "The nightmare of J.B. Stanislas" acompañado de banda y dos violines, dos violas y un cello, justo lo que esperábamos. Elementos que le dieron a sus canciones el color que necesitaban, y que como no podía ser menos, me emocionaron. He de reconocer que me costó un poco entrar en el concierto pero a la tercera canción, "Can I stay with you", me tuvo en el bote. Se mostró, además, muy cercano, bajando incluso del escenario para una de las canciones. Especialmente bien me sonó "Wheel of fortune" por esos arreglos de cuerda tan brillantes, uno de esos momentos en los que se me erizaron los vellos. Una dulce y preciosa manera de empezar el segundo día primaveral.
Salimos del Auditori Viola, Paloma, Victor y yo directos al Pitchfork para disfrutar del dúo mallorquín Beach beach, tan monos ellos, y su indie-rock alegre y sin pretensiones, que nos dibujó una sonrisa y nos hizo bailar un poco, y de ahí, a coger buen sitio en el San Miguel para ver a Other lives, donde se nos fueron uniendo paulatinamente bboyz and family, Lapor, Txarls, JMHulme y Julia, mientras Vanessa desapareció entre las primerísimas filas sin posibilidad de encontrarla. Empezaron especialmente atronadores de sonido y me incomodaron los primeros temas, lástima porque uno de ellos fue la preciosa "As I lay my head down", pero por suerte al final me fueron encandilando y finalmente disfruté mucho del concierto, especialmente de los momentos instrumentales al violín, el cello o la trompeta, ya sabéis, esas pequeñas cosas por las que siento debilidad. Texturas instrumentales complejas, folk con gotas de experimentación y atmósferas épicas en pequeño formato, una delicia.
Me encontré entonces con mi amiga Lídia, que a abono regalado y sin prioridades, venía a la deriva de lo que yo le enseñara. Tras un breve paso por el ATP para ver a Siskiyou, nos reunimos de vuelta al San Miguel con Sara, Naiara, Adriana, Anna y Viola para coger sitio para otro de mis conciertos más esperados, Rufus Wainwright. Puntualmente a las 19:50 apareció en el escenario vestido tan hortera como de él se espera, marcándose a capella parte de "Candles" enlazada con "Rashida", ambas del último disco, dejándome literalmente paralizada, con la boca abierta y los ojos empañados, suerte de mis gafas de sol, que fueron mi mejor aliado durante todo el concierto. Porque hacía mucho que no derramaba tantas lágrimas en un concierto, tal fue la intensidad emocional del mismo, o lo que a mí me llegó personalmente. Con una voz impecable y todo su porte y simpatía, fue desgranando bastantes temas de su precioso último disco, "Out of the game", con ejecución perfecta y acompañado de una buena banda y una corista negra de bonita voz. De trabajos anteriores cayeron, entre otras, "The one I love" y una de mis favoritas de su repertorio, "Going to a town", el momento en que empezaron a caerme las lágrimas, para continuar cayendo con "Montauk" ya sin poder disimular de ninguna de las maneras, porque esta canción dedicada a su recién adoptada hija es mi preferida de su último disco, una canción emotiva y preciosa con una letra que me llega al alma, la combinación perfecta entre ambos elementos, y la razón por la cual acompaña esta entrada. Finalizó, en sus propias palabras, con un tema alegre, "Bitter tears", también del último. Lo único que se le puede achacar a su directo es que abusara de los temas nuevos, pero si os he de ser sincera, poco o nada me importó. Porque aún así, fue otro de mis conciertos de este Primavera.
Nos abandonó Viola para presenciar ella quizás uno de los momentazos del festival de este año, el Big Star's Third, donde todos debíamos haber acabado, pero qué se le va a hacer. Aún en una nube tras Rufus, decidimos sentarnos tranquilas en las gradas del Ray-Ban, vista al mar, y ver desde arriba mientras añochecía a Afrocubism y su exótica propuesta, hasta que de tanto descansar se nos fue el santo al cielo y el San Miguel ya rebosaba de gente expectante por ver a The Cure, adiós al buen sitio que queríamos. Curiosamente fue el único concierto de los que vi que no empezó puntual. Y qué decir del concierto de The Cure. Pues que técnicamente fue espléndido, que Robert estuvo a su altura, dándolo todo, que sonó muy bien. Que fue un concierto ideal para hacer muy felices a los fans acérrimos que se acercaron a verles, casi un regalo para ellos, ya que desgranaron durante tres horazas de concierto una enorme multitud de temas, desconocidos por otra parte por muchos de nosotros. Ello hizo que el cansancio hiciera mella sobre nosotras a la hora y media de concierto y que acabáramos sentadas detrás, sedientas y acaloradas a la búsqueda de un mochila man con cerveza que no pasaba nunca, esperando "Boys don't cry", que nunca llegaba. Y resultó que de repente sin darme cuenta era la una, habíamos quedado a esa hora con Lapor en el Mini, y había que irse para poder ver bien a M83, y nos tuvimos que quedar sin nuestro hit.
Fue decisión de última hora ir hasta allí, porque yo quería ir a ver a The drums, pero el vivo recuerdo del conciertazo de marzo hizo que cambiara mi parecer y acabara otra vez en las garras de Anthony González y su mezcla de atmósfera y delirio discotequero. Y volví a sentir lo mismo que entonces sólo que con más espacio para bailar, volvió el delirio con "Reunión", con "Fall", y a temblar el recinto con "Midnight city", volvió a salir ese enloquecedor saxo a final de canción, volvió a hacernos bailar con sus "Couleurs" instrumentales. Volvió a ser tan grande.
Finalizó el concierto y esta vez tocaba correr al San Miguel, al que llegamos justitas para el concierto de The rapture, a las primeras notas de "In the grace of your love". Si lo de M83 fue grande, esto lo superó, nunca lo pensé. Nunca pensé que un concierto al cual simplemente iba a darlo todo con los dos temazos que les conozco sería tan y tan bueno, y desde el primer momento. Que nos dejaría a todas tan alucinadas. Porque estos sí que pusieron patas arriba ese escenario, ganando aún más intensidad a medida que avanzaban repertorio, llegando al éxtasis primero con "Echoes" y finalmente culminando, si cabía, y como no podía ser menos, con la esperadísima "How deep is your love", que sonó impecable, intensa, con todos los elementos que la hacen tan grande (saxo final incluído). Un tema que nos enloqueció a todos, que puso las manos de todo el mundo arriba, que visto desde lejos debió de provocar una estampa visual espectacular. Otro de los momentazos de este Primavera, para otro más de mis conciertos de este Primavera. Y muy especial por haberlo compartido con todas ellas. Sublime.
Quizás por la cantidad ingente de cerveza que llevábamos encima, fruto de la sed, decidimos alargar la noche. Nos reunimos con un Txarls que aún se estará riendo del panorama fiestero que presenció, en uno de esos momentos divertidos que siempre recordaremos con mucho cariño. Un par de vueltas al recinto, algún bailoteo, muchísimas risas, y a casa, a guardar fuerzas para el día siguiente. Un gran día.
Maravillosos eventos para antes de enviarte a Ljubljana ¿no había un sitio más cerca?
ResponderEliminarQue día tan intenso, había tanto concierto que ver imposible no disfrutar y más si uno de los que te apetecía que era el de Rufus te convence tanto
ResponderEliminarSergio, ya ves dónde me enviaron, pero oye, muy lejos pero muy bonito al final... y aún así, no he podido quitarme aún de la cabeza todos estos preciosos momentos vividos.
ResponderEliminarBoris, pues sí, tan intenso como todos los días en un festival, a veces con tantos conciertos te puedes saturar, también te lo digo, pero si te lo montas bien es realmente una gozada. Y Rufus fue mucho más de lo que esperaba, una gozada.
ResponderEliminarDoy fe de lo último...deberías haberme dicho donde estaba la barra que ponían sustancias piscotrópicas en la bebia :D
ResponderEliminarAnda que menudo show armastéis, aunque probablemente tuvo mucho mérito por lo de hacer bailar a los Indies, algo que por ejemplo no consiguió ningún grupos ubicado en una franja horaria lejana de la madrugada.
Gran texto...mucha envidia (The Rapture, tú ya sabes...).
Besosmil!
Que rica la sopa de sandia de paloma, a ver si doy con la receta. Preciosa preciosa preciosa can i stay with you, como me gusta esa canción! Fue un concierto muy bonito. Me pareció encantador rufus y aunque al final no me fui, he de decir que lo iba a hacer pero tocó una canción del último y ya me quedé pero no me gusta mucho rufus, ya confirmado, lo mejor fue cuando me empezaste a contar la historia de una de las canciones casi me haces llorar!! La de los padres e hijos, que canción era ¿? La de going to town ¿?
ResponderEliminarEn fin, mi viernes se salvo y de que manera por lo de big star porque luego lo fastidié yendo a los cure, para mi un día muy flojo aunque por otra parte será uno de los inolvidables.
Acertateis de pleno no yendo a los drums…. Que pena lo de los rapture pero a saber como hubiera estado el sábado, en fin, ya me resarcí el sábado :p
Un besote.
txarls, sabía que te reirías con eso, más que nada porque recuerdo el comentario que hiciste al día siguiente cuando me viste, jeje. Cosas del cansancio y la sed extrema que te llevan a beberte un litro de cerveza en tiempo record, a lo que le sumas conciertos de M83 y colofón de fiesta con The rapture, y ahí nos tienes, jejeje.
ResponderEliminarMe alegro de que te guste el texto :-) Aix, sí, tendrías que haberte venido, otra vez será!! Anda que no dáis envidia vosotros con Girls!!! Qué rabia me dio perdérmelos!!!
Besos!!
Viola, joé cómo estaba la sopa de sandía, qué chulo ese sitio, tenemos que volver el año que viene!! (o cuando vuelvas a Barcelona) Nick Garrie teníais toda la razón, es encantador. Te pueden gustar más o menos sus canciones, pero si te dejas llevar te encandila en directo, me encantó cuando se bajó al público y casi saca a una chica, y esa canción es que es preciosa.
ResponderEliminarRufus es una debilidad personal. Reconozco que puede hacerse muy cargante con facilidad, porque toda su música tiene un barroquismo que según a quien se le puede atragantar. A mí me encanta, aparte de por su increíble voz, por como mezcla de bien el pop con la música clásica, amante como soy de este último género, agradezco encontrar gente que la fusiona con la música moderna de manera correcta y hace maravillas con ello. Como te dije, la canción a la que te refieres precisamente es ese Montauk, recordarás que lloré como una madalena cuando la cantó... :-) Qué vergüenza... jeje
Pues mira, lo de Big Star fue ese concierto en el que deberíamos haber estado todos, que con una horita de The cure teníamos más que suficiente, jeje. Para mí el viernes quizás fue el día más fuerte musicalmente, pero es que entre Rufus y The rapture no puedo considerarlo de otra manera. The rapture tengo mis reticencias, no sé si te habrían gustado, hiciste bien en retirarte, aunque la que liaron fue digna de ver.
Un besazo!!!
El viernes para mi sorpresa fue el mejor día del festival. Y eso que al llegar tarde y aturullado a Nick Garrie no pude disfrutar del carisma de ese hombre como se merece: pero con Laura Marling recuperé la fe en la música, y luego enlacé Other Lives, Girls y Big Star's Third, fantástico todo. Una pena que no estuvieras en el Auditori con estos últimos, hubieras gozado cosa mala. (Por cierto, el hipervínculo que enlazas en "donde todos debíamos haber acabado" va a una entrada de M83 que no tiene molt a veure con lo que explicas. ¿Error o surrealismo posmoderno? :P)
ResponderEliminar¿No hay registro audiovisual de la fiesta cervecera? Y al día siguiente al Parc, qué aguante tenéis, madre mía...
JMHulme, he de decirte que para mí también, para mi sorpresa, también. Jo qué lástima que llegarais tan justitos para Nick Garrie, pero qué buen concierto fue!! Ahora recordé un detalle que nos hizo gracia y querría rememorarlo, el momento "gafas del serca" (como dicen en apm :-p), realmente fue muy tierno, me recordaban a mis padres. Vosotros os disteis un tute a primeras horas que tela, os admiro!! Me da mucha muchísima rabia lo de Girls, sé que me hubiera encantado, quien sabe, quzás también hubiera sido uno de mis conciertos del festival... pero con Rufus, no había competencia, una lástima. Lo de Big Star's Third me dio mucha lástima, cuando me dijeron que encima salieron con una orquesta casi me echo a llorar, sé que lo hubiera disfrutado como una enana, privilegiados vosotros que lo presenciasteis. Ya te lo dije, mil gracias por corregirme el error, sí, surrealismo posmoderno de escribir la entrada a las 11 de la noche tras haber dormido la noche anterior menos de 4 horas, es lo que tiene, jejeje.
ResponderEliminarEjem... si existe tal registro, ya me encargaría personalmente de que no saliera de allí donde esté, jejejeje. Ya ves, sí, aguante... que el sábado a las 3 hizo mella y me dejó con ganas de quedarme de fiesta por el forum, en algún momento tenía que pasar factura...